Área personal

Carnegie

Julio López 7 Feb 2018

Tenía el millonario americano Andrew Carnegie un perro al que quería mucho. Una vez que pasaba unos días de vacaciones en el lago Michigan, perdió el perro, y puso un anuncio en el periódico local, el Morning Herarld: “Perdido un Fox terrier blanco que responde al nombre de Billy. Se ofrecen 1.000 dólares a quien lo encuentre y lo devuelva a su dueño en el Star Palace”. El anuncio no se publicó y Carnegie fue a la redacción a protestar. No había nadie. Llamó a voces y, al fin, le atendió una mujer que estaba limpiando los suelos.

-          ¿Es que no hay nadie?

-          No, se han ido todos

-          Pero, ¿qué ha pasado?

-          Por lo que he oído, me parece que han ido en busca de un perro blanco que se llama Billy.

En los mercados financieros esta semana ha pasado algo similar, hemos ido a ver dónde estaban los compradores que creíamos que estaban afanosamente trabajando, y no hay nadie. La pregunta que más me están haciendo desde hace unos días es si esta es la caída “buena” de los mercados. La respuesta es muy rápida: no tengo ni idea. ¿Qué es lo que ha provocado la caída? Pues tres cuartos de lo mismo. No hay nada realmente nuevo en el mercado que no estuviera ya comentado hace una semana, un mes, seis meses o un año. Lo que sí ha quedado claro con el movimiento es que no hay ningún artículo en la carta de Fundación de las Naciones Unidas, la Constitución americana o incluso en la española que garantice que las acciones siempre tengan que ir hacia arriba. Lo que sí me llaman la atención, una vez más, son los titulares de prensa como si el mundo se acabara. Para contradecirles, no hay más que enseñarles un gráfico con la evolución de la bolsa americana y el efecto minúsculo que tiene la caída de precios, apenas perceptible. Sigue subiendo un veintitantos por ciento desde enero del 2017, y todavía estamos un 70% por arriba de los máximos anteriores a la crisis del 2008.Las reacciones han sido muy diversas. Están los que responden que los fundamentos sólidos son muy fuertes (habría que recordarles la fuerte subida de las bolsas cuando no lo eran…). Trump no ha twitteado nada las últimas mañanas de que las bolsas ascendieran a los cielos debido a la confianza que generan sus políticas, pero su oficina si comentó el segundo día de caídas, que se estaban monitorizando de forma muy próxima los movimientos de la bolsa. Algún gurú que hace una semana decía que tener dinero en liquidez era una gilipollez, ahora no tendrá mucho dinero para comprar en estos momentos, y alega que hay un verdadero maná de clientes calentando en la banda para poder entrar en el terreno de juego. Siempre hay posiciones y explicaciones para cualquier situación. Una de las cosas que más se me quedaron en la carrera fue una frase que nos comentaba Angel Bergés en Análisis Bursátil. “No le pidas nunca opinión a un analista financiero o gestor, porque el único interés que va a tener es defender su posición, tomada anteriormente, para que la sigan los demás y poder ellos salirse”.

Intentar predecir cuándo se van a dar los movimientos no lo sabemos nadie, llevemos veinte o treinta años en los mercados. Como decía JP Morgan, cuando algún periodista le preguntaba qué iba a hacer la Bolsa al día siguiente, “fluctuará”. La bolsa ha perdido un 10% desde sus máximos, pero sinceramente, todavía es pronto para saber si es una nueva oportunidad de compra o es un giro definitivo de una tendencia alcista impoluta en la bolsa americana desde hace nueve años. En el caso del SP 500 se pueden aventurar algunos puntos clave. Para mí, el nivel más relevante se encuentra en los 2535 puntos, que tocaron en la noche asiática de ayer, pero a los que no nos acercamos luego en la sesión americana. Corresponden a la media simple de 200 sesiones diaria y a la directriz alcista iniciada en enero del 2016. Su ruptura sí pondría las sirenas a sonar. El siguiente punto relevante está en los 2175 puntos, que es la línea de tendencia principal que une los mínimos del 2009 y el 2016. Coincide aproximadamente con la media de 200 sesiones semanales y los máximos del año 2015. Parecen niveles alejados, pero las semejanzas con los movimientos del 2000 y el 2008 son a tener en cuenta. Sabemos cómo es el humor de los inversores, y si siguen existiendo los ciclos inversores, tras la complacencia sigue el pánico, y los que están encantados comprando a 20, cuando llega a 10 piensan que se irá a 5 y lo venden todo.

La tendencia alcista en los mercados ha sido extraordinariamente fuerte, y hay algunos aspectos técnicos en los mercados que debemos considerar. Uno de los aspectos más curiosos de estos años es la relación de la volatilidad con las cotizaciones. Como saben, las subidas de mercado han venido acompañadas con una bajada brutal de la volatilidad. De hecho, se creó un futuro que tenía precisamente como subyacente la propia volatilidad. Si miraban los gráficos de muchas sesiones de la bolsa americana durante 2015 o 2016, podrán ver como los movimientos finales de la bolsa venían precedidos o simultaneados por movimientos en los futuros sobre el Vix. Se compraban tropecientos futuros del Vix y se veía un reflejo inmediato en subida de los futuros del S&P. La volatilidad es un activo financiero más. Y tiene un efecto afrodisiaco sobre los que juegan con ella, porque les permite ganar dinero todos los días a los vendedores de volatilidad,siempre que no pase nada. El ir echando una moneda en la hucha todos los días atrae a muchos jugadores. El 95% de los días ganas dinero y piensas que el otro 5% de los días lo puedes afrontar porque puedes controlar relativamente fáciles las pérdidas. Es algo parecido al criterio VaR de control de riesgos. La realidad es que ese 5% puede ser más habitual de lo que establece a priori la estadística, y los riesgos de cola se convierten en incontrolables. Sobre todo si se multiplica por cuatro en un día. Lo hemos podido comprobar en el NAV de algún fondo que vende volatilidad apalancada. El XIV (VelocityShares Daily Inverse VIX Short-Term) valía 108.36 el viernes y 4.22 el lunes. 3150 millones de dólares de activos volatilizados (eso sí, el año pasado gano un 150% y se habían disparado sus suscriptores). Mucho del movimiento bajista del lunes viene motivado por los cierres de la gamma negativa de estos fondos. Cuando el mercado se da la vuelta el agujero de salida es diminuto…

 Todo el movimiento alcista de estos años apoyados en los Bancos Centrales y en las recompras de acciones han ido arrinconando la volatilidad hasta hacerla casi desaparecer. Hay muchos productos financieros que han sido estructurados con esas volatilidades bajas. Productos que han ido ganando en apalancamiento y que se encuentran ahora en un cruce de caminos, con la deuda emitida en máximos históricos y con un posible incremento en los tipos de interés. Tenemos que ver cómo reaccionan estas estructuras en mercados a la baja. Y lo que sí puedo afirmar es que lo pueden hacer independientemente de que la situación económica sea sólida. Durante esta última fase alcista también hemos visto la preponderancia adquirida por los fondos pasivos que básicamente compraban todo el mercado independientemente de las valoraciones de las compañías. Compraban en función de su ponderación en los índices (eso lo vemos sobre todo en el Dow Jones que no es un índice de capitalización y las acciones más altas en precio son las que más beneficiadas se han visto por este flujo).Tenemos que ver ahora el ciclo completo de inversión y si entráramos en un mercado a la baja, si estos fondos agrandarían todavía más los movimientos negativos. El peor escenario es que todo el mundo estuviera ya dentro, y ante la vuelta de estos jugadores o de otros similares (fondos de risk parity, fondos de VaR que cuando llegan a una pérdida determinada tienen que vender a cualquier precio) no haya contrapartida, aunque existan gangas en el mercado.

Imaginar de forma deliberada circunstancias y escenarios alternativos que puedan dar al traste con nuestros deseos es la mejor forma de no confundir nuestras esperanzas con la realidad.

 

Buena semana

Julio López Díaz, 07 de febrero de 2018

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